"¿Felipe? ¿Felipe qué?" exclamaba atónito el enviado especial de Paris Match al ser preguntado sobre la cobertura de la boda de Felipe y Letizia. "No, yo vengo a lo de la Karakola y La Biblio". El anuncio de los esponsales de estos históricos y afamados colectivos lavapiesinos, foco ahora de la atención de prensa y público, corre el riesgo de relegar la boda real a las páginas de sucesos, hasta el punto de que el alcalde de Madrid, visiblemente desmejorado, ha tenido que comparecer ante los medios de comunicación para rogar a los ciudadanos que por sus muertos salgan a agitar la banderita al paso de la comitiva regia. Porque, en efecto, ¿quién quiere permanecer de pie el sábado durante horas sufriendo la halitosis de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado hábilmente disimulados entre el público y con un 70% de probabilidades de lluvia cuando puede darle gusto al cuerpo bailando a cubierto al son de los mejores DJs del reino? "Primero la lluvia y ahora esto", dice con un hilo de voz el jefe de la Casa Real mientras se mesa los cabellos. "Tranquilidad. Serenidad. Calma", se aconseja desde el Ejecutivo, que según rumores sin confirmar estaría planeando trasladar la boda real a Sorihuela del Guadalimar (Jaén) como parte del programa de las fiestas patronales.
Los colectivos contrayentes, por su parte, rehusan por el momento hacer declaraciones: "ha sido un flechazo", aseguran, "pero ya sacaremos un comunicado o algo contando cómo ha sido la cosa. Lo importante ahora es ir a la fiesta". Desde ambas familias, sin embargo, se asegura que hacía tiempo que se las novias se veían en secreto, y afirman que de ningún modo los esponsales supondrán una ruptura con la promiscuidad que las ha caracterizado toda la vida: "Son muy liberales y además ya son mayorcitas para hacer lo que quieran". Efectivamente, La Biblio cumple el próximo verano su décimo año de vida, y la Karakola hizo ocho en noviembre. La Biblio se instalará tras la boda en el edificio de la Karakola, aunque contará con una entrada independiente ("Cada una en su lado y el pendoneo en el de todas", ha dicho con sorna uno que pasaba por allí parafraseando el célebre dicho popular). Se inaugura así un espacio inédito cuya andadura prometía ser infinita de no mediar una amenaza de desalojo traicionera, que en cualquier caso ambos colectivos confían en capear con la inestimable ayuda de la ciudadanía toda.
En resumidas cuentas, que El sábado 22 de mayo, a partir de las 22 h., gran fiestón matrimonial en La Karakola, c/Embajadores 40 - c/Rodas 1 (hay que ir de etiqueta. Interprétalo como quieras). Antes de eso, a las 19.30, se proyectará la peli Alejandro y Ana (Animalario, 2003)