BRECHA
20 de Junio de 2003
| Luis Rosadilla es uno de los asesores del senador
Fernández Huidobro. Detenido en 1973, estuvo diez años preso en el penal de Libertad.
Cuando durante la reciente visita entró a una de las celdas nuevas subió por la escalera
hasta la parte superior de la cucheta; se acostó boca arriba, luego se puso de costado.
Sorprendido por BRECHA, respondió a la pregunta acerca de su actitud: «Quien tiene
cierta experiencia en cárceles sabe que el espacio es muy importante, sobre todo cuando
el tiempo a permanecer en ellas es largo, como será sin dudas en estas cárceles de alta
seguridad. Es claro que en este lugar es muy difícil la convivencia de tres seres
humanos, sobre todo si está construido para dos. Acostarme en el colchón de arriba
significó comprobar físicamente que quien duerma allí, cuando gire, con el hombro
tocará el techo. Es imposible que estas celdas se utilicen para largo plazo. Incluso
algunos funcionarios del Ministerio del Interior presentes me comentaron que esto sólo
podía servir como centro de diagnóstico y redistribución, porque de lo contrario
significaría un plus en contra del preso». |
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