Compañeros:
La Solidaridad no es cuestión de meras palabras...
Estamos cerca ya de 3 años de la injusta y arbitraria detención y tortura de Miguel,
Alexander, Alexis y Gerardo, y este acto es un paso más en la campaña internacional para
lograr su liberación.
Hace cerca de tres años parecía que nada se podía hacer nada. Que como siempre la
injusticia y la impunidad para los torturadores era la realidad imposible de revertir.
Hace cerca de tres años un grupo de vecinos reclamaba la libertad de nuestros jóvenes
presos. Eramos pocos. Al juez Corujo le pareció "improcedente e impertinente"
estas firmas que reclamaban el respeto de los tratados internacionales sobre derechos
humanos.
Hoy sabemos que podemos luchar. Hoy sabemos que la lucha va abriendo caminos. Y así desde
la barriada de Manga y los calabozos del COMCAR esta lucha abrió caminos. Hoy esta lucha
camina por los barrios de Montevideo y los pueblos del Interior, es una lucha de jóvenes
de los barrios y los centros de estudios, recorre intersociales, radios comunitarias y
prensa compañera, sindicatos solidarios y cooperativas que ven que la impunidad de los
ricos y los milicos hay que ponerle un freno. Esta lucha ya es internacional. Tiene su
sitio en internet y habla más de 8 idiomas. Es una lucha que tiene muchos frentes. En los
juzgados, en la cárcel donde nuestros jóvenes con dignidad enfrentan la prepotencia
represiva, en las calles...
Cuando fue iniciada la campaña parecía que era imposible hacer algo para organizarla.
Más hoy, sin la rapidez que queremos, pero firmemente se van sumando jóvenes en barrios
y centros de estudio que ven en ésta la perspectiva de luchar por una salida a su
situación.
Los obstáculos continúan y más van a ser si esta campaña se sigue desarrollando.
Porque la lucha por la libertad de los Muchachos pone al desnudo toda la represión que
hoy se descarga contra los jóvenes de parte de este gobierno y de su parlamento.
Las numerosas adhesiones recibidas diariamente, y para este acto, de varios países de los
cinco continentes, expresan la verdad de nuestra lucha y que no es exclusivo de Uruguay,
que los jóvenes en todo el mundo son reprimidos para que no se rebelen y organicen ante
la falta de perspectivas.
Desde las prisiones de EE.UU. a las batallas de los jóvenes argelinos, pasando por
Génova y los piqueteros de Argentina y los colectivos de presos de España y Chiapas y
los estudiantes mexicanos, los jóvenes de Turquía e Israel, de todos estos lugares, en
total 30 países, nos ha llegado la solidaridad.
Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Colombia, México, Venezuela, Panamá, Bolivia, Perú,
República Dominicana, Canadá, EE.UU., España, Suecia, Italia, Alemania, Francia,
Inglaterra, Portugal, Grecia, Turquía, Argelia, Australia, Irlandia, República Checa,
Israel, Holanda, Suiza, Bélgica.
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