Montevideo, 1o. de julio de 2002

1) El procesamiento con prisión de los jerarcas carcelarios, incluido el director nacional, Carlos De Avila, pone de manifiesto algo que han venido denunciando los familiares y presos de diferentes cárceles. La corrupción es uno de los pilares fundamentales de la política carcelaria del Estado uruguayo basado exclusivamente en los depósitos de gente y un desprecio absoluto de los más elementales derechos humanos de las personas detenidas, lo que configuran que las cárceles sean verdaderos campos de concentración.

2) El proceso que se inicia y las declaraciones de alguno de los jerarcas, hoy presos, plantea cosas muchísimo más trascendentales que un "abuso de funciones". Es claro que se está, por las declaraciones emitidas ante la prensa, con elementos que podrían clarificar el exterminio de presos que se ha estado llevando adelante en el penal de "Libertad". Los "suicidios" con que De Avila quiso engañar a la opinión pública en realidad eran lo que siempre denunciamos: simples asesinatos.

3) Hoy se habla de túneles que serían depósitos de drogas y hasta las sumas que habrían pagado para su construcción. Sin embargo desde la Dirección de Cárceles y el Ministerio del Interior se informó oportunamente a la opinión pública que eran túneles para evasión de presos.

4) Todas las denuncias que finalmente llevaron al procesamiento de estos jerarcas, y que seguramente arrastrarán a otros, el Ministerio del Interior las manejaba desde el primer momento. Sin embargo permitió que De Avila y Cía. siguieran al frente de las cárceles como si no pasara nada.

5) En estos meses los presos de "Libertad" tuvieron que rebelarse y enfrentar la furia represiva desatada desde la cúpula carcelaria, porque la vida en ese campo de concentración era insostenible para cualquier ser humano.

6) De Avila encabezó la cruzada de "hay que matarlos a todos", y ha hecho todo lo posible, en los momentos del motín y después para llevar adelante su delirio fascista.

7) Es que en los campos de concentración, que son una viña para la oficialidad y algunos políticos, la rebeldía de los presos no puede tener lugar, porque les cuestiona el despotismo y la corrupción imperante.

8) Desde la Rebelión del 1º. De Marzo hasta ahora hay presos que han permanecido en los escombros del penal -ahora los han amontonado en containeres totalmente inhabitables- y otros permanecen en La Tablada con un régimen de aislamiento prácticamente total.

9) Estas han sido órdenes directas de De Avila y han contado con el beneplácito del Ministerio del Interior.

10) Lo dijimos en los días del Motín. Esta lucha abre camino a dos opciones posibles: Una reforma carcelaria que formule una política en la materia basada en el respeto de los DDHH o una represión sin antecedentes en el país. La dirección de cárceles, con De Avila a la cabeza y el beneplácito del Ministerio del Interior eligieron el camino de la represión, con su secuela de gente apaleada, torturada, hambreada y la trágica lista de "ahorcados".

11) Todo eso para mantener el poder y el privilegio de una gavilla de milicos corruptos y violadores de los DDHH.

12) Hoy la Justicia parece que va a encarar en algo su cometido. Esperemos que llegue al fondo con este proceso.

13) Y decimos en algo porque el recurso de amparo que fue presentado por la situación de 150 personas que se encontraban recluidas en los escombros del penal de "Libertad", sin atención médica de ninguna especie, mal alimentados y sometidos a brutales palizas y todo tipo de represión así como la amenaza latente de "ahorcamientos..., no solamente fue denegado por el Juzgado de San José sino que ha trancado la apelación que oportunamente se realizara y al día de hoy no ha sido elevado al Tribunal de Apelaciones.

14) Todos estos hechos y el fascismo cotidiano que se vive en las cárceles del país, deja claro que el Ministerio del Interior no puede seguir rigiendo la vida carcelaria. Que no puede haber un poder omnipotente que haga y deshaga a su antojo y que las únicas medidas que se le ocurran sean mantener gente en escombros o nombrar notorios violadores de DDHH al frente de una cárcel como hicieron en "Libertad".

15) Al mismo tiempo el Ministro del Interior que ha estado sosteniendo a De Avila y Cía., manejando todas las denuncias que se le estaban realizando, no puede solucionar esto con unas simples palabras que denotan "amargura" por los sucesos, o como dice su sub. secretario que hasta ahora no se han probado las coimas y demás delitos... En definitiva desde el Ministerio mismo se ha impulsado esta política donde la gente una vez prisionera pierde sus más elementales DDHH. Y como se afirma que estamos en una democracia ese ministro no tendría permanecer más al frente de dicha cartera.

16) Nosotros seguiremos luchando por el respeto de los DDHH y trabajando para organizarnos mejor, los familiares y al mismo tiempo apoyando las formas organizativas y de lucha que se está dando la juventud encarcelada que el 1º de marzo le dijo a los campos de concentración que no caminaban más.