LA
REPUBLICA
27 de Diciembre de 2002
De 174 beneficiados sólo el 2,3 por ciento violó las
disposiciones
Cuatro presos no regresaron de las salidas de Navidad
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| Las autorizaciones judiciales otorgadas a 174 reclusos
alojados en prisiones de la Dirección Nacional de Cárceles fueron aprovechadas por
cuatro de los beneficiados que no se presentaron al término de las mismas y siguieron
"de fiesta" |
Dos de los evadidos por las salidas navideñas se encontraban
recluídos en el Penal de Libertad.
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Las autoridades carcelarias consultadas por LA REPUBLICA indicaron
que, teniendo en cuenta que sólo el 2,3 por ciento de los presos con salidas violaron la
ley, y que dentro de los penales y en ocasión de las visitas no se registraron
incidentes, la fecha festiva transcurrió con tranquilidad dentro de las principales
cárceles del país. Cada año, al llegar estas fechas tradicionales, la situación tras
las rejas se tensa un poco, lo que lleva a adoptar algunos dispositivos preventivos.
De acuerdo a la información brindada por Cárceles en la víspera, en esta oportunidad
los problemas surgieron desde fuera de la prisión. La lista de ausentes comenzó a
nutrise sobre las 20 horas del 24 de diciembre cuando Walter Omar Garagorry Mattos,
oriental soltero de 30 años no volvió al Comcar tal como la Justicia le había ordenado.
Había obtenido una salida especial domiciliaria de 12 horas, con tutela, para que pudiera
estar con su familia en vísperas de Navidad.
Garagorry está procesado por coautoría de rapiña especialmente agravada a disposición
del juez Penal de 9º Turno. Cinco minutos después se conocía la segunda violación, en
este caso en el Penal de Libertad, cuando Alejandro Daniel Lorenzo, oriental de 28 años,
extendió el plazo de 10 horas que se le había otorgado para estar con los suyos. En este
caso también contaba con una tutela.
Este individuo había sido procesado por el juez Penal de 1er. Turno por "dos delitos
de rapiña especialmente agravada, una en el grado de tentativa en reiteración
real".
Ya sobre las 6 y 50 del 25 de diciembre, también en Libertad, se conocía la tercera
fuga, cuando Eduardo Sosa López de 22 años, procesado por el juez Penal de 12º Turno
por "rapiña muy especialmente agravada en reiteración real". Este joven gozaba
de una salida tutelada de 12 horas cada 60 días.
Ese mismo día, pero sobre las 16 y 30 y en el Centro de Reclusión La Tablada, se
conoció el cuarto "faltante" al no presentarse al establecimiento Francisco
Taronta Dos Santos, oriental de 23, quien se había beneficiado con una salida transitoria
especial y tutelada de 24 horas. Está procesado por "rapiña en reiteración
real".
Buena conducta
Desde la dirección de Cárceles se hizo saber que todos los evadidos se encontraban en
una etapa de media seguridad del Sistema Progresivo Penitenciario y aún no se había
podido regularizar, por problemas locativos, su pasaje a la etapa de mínima seguridad, en
la que se prevé la posibilidad de acceder a las salidas transitorias.
En cuanto a los informes producidos por las autoridades de cada uno de los centros
involucrados, se informó que los mismos eran favorables en cuanto a la obtención del
beneficio, ya que poseían buena conducta. También cumplían con los requisitos legales
según lo estipulado por el Instituto Nacional de Criminología, por lo cual los jueces de
causas entendieron ajustado a derecho otorgar las salidas.
Las fuentes indicaron que entre el 24 y 25 de diciembre de un total de 3.375 presos, 174
obtuvieron la posibilidad de reunirse con sus familiares.
Una cifra similar se espera para fin de año.
Procesados
Por otro lado, en las últimas horas fueron procesados dos reclusos del Comcar por
"daños especialmente agravados", tratándose de Claudio de los Santos, de 18
años (procesado por hurto en grado de tentativa) y de Heber San Juan Robaina, de 24
años, con igual antecedente. El dúo de internos se encontraba alojado en el Módulo IV y
el 17 de diciembre pasado procedieron a quemar intencionalmente un colchón de la celda,
lo que produjo una alta concentración de humo. El siniestro fue extinguido por la guardia
penitenciaria, que rescató a los presos. Estos terminaron internados en el Hospital Saint
Bois con quemaduras de primer grado, al tiempo que un agente debió ser derivado al
Hospital Policial con un principio de intoxicación sufrido durante la evacuación. Ahora
los reclusos deberán esperar a cumplir la pena por el hurto para después ponerse al día
con la recientemente recibida. * |
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