NOTICIAS
DE RECOSUR
No. 227 - 23 de Octubre del 2000
CON LUIS GIMÉNEZ
«EL APARATAJE JUDICIAL ES UN VERSO».
Montevideo, 23/10/00. Hace más de un año, el 27 de setiembre de 1999, eran
detenidos por la Policía los jóvenes Gerardo León Giménez, Miguel Emiliano Giménez,
Alexander Montero, Alexis Tourné y un menor de edad. Los cinco fueron encarcelados
inmediatamente, acusados de robo. Los hermanos Giménez son suecos, no tienen ciudadanía
uruguaya. El juez William Corujo Guardia los condenó a más de 7 años de penitenciaría
por el delito de rapiña, cuando la máxima sanción en estos casos es de 5 años.
Es que nosotros siempre hemos denunciado la existencia de torturas y las
irregularidades en este episodio, dice Luis Giménez a RECOSUR. Por eso se da
este ensañamiento -agrega-, pues incluso el magistrado dice que se vieron
beneficiados en su condena por haber confesado, primariedad y minoridad relativa.
Luis Giménez, es padre de dos de estos jóvenes, que nacieron en Suecia durante su exilio
en el período de la dictadura militar. A su vez integra el «Comité por la Libertad de
los Muchachos Presos». Actualmente varios muros de la capital uruguaya señalan que el
Juez William Corujo «condena sin pruebas y legaliza la tortura».
Desde un principio el Comité ha denunciado que las confesiones de los jóvenes fueron
arrancadas por la tortura, y con falsas pruebas. Iniciándose inmediatamente una
movilización internacional denominada «Campaña por la Libertad de los Muchachos
Presos». A ella se han sumado organismos de Derechos Humanos como Amnistía
Internacional, Servicio, Paz y Justicia (SERPAJ), el parlamento nacional y el propio
gobierno sueco, en la medida que los hermanos Gerardo León y Miguel Emiliano Giménez son
ciudadanos suecos. También el vecindario ha sido solidario con los jóvenes y ha recogido
firmas en su apoyo.
La sentencia fue dictada el pasado 15 de setiembre, condenando los jóvenes a más de 7
años de penitenciaría. Según Luis Giménez, a nivel judicial se apelará la sentencia,
quedando como última instancia la Suprema Corte de Justicia. Advirtiendo que «ahora
que se dictó sentencia el Parlamento también puede tomar la iniciativa». A la vez
que el gobierno sueco está estudiando que pasos dar al respecto.
En un documento que ha elaborado el Comité que pugna por la liberalización de los
muchachos denuncia que se los condenó «sin ningún tipo de pruebas materiales,
solamente con la confesión emergida de la tortura, la presión y amenaza de muerte para
que la sostuvieran en el juzgado».
Asimismo en el informe se manifiesta que ninguno de los acusados «han sido
reconocidos como asaltantes por ninguno de los comerciantes asaltados, inclusive uno de
ello que da descripciones físicas que no corresponden en absoluto a las de estos
jóvenes».
Para Luis Giménez, «más tarde o más temprano esto se va a saber. Si quieren seguir
con esto de que nuestro país es confiable en materia de Derechos Humanos, alguna
solución van a tener que encontrar».
Giménez observa que el país está siendo cuestionado a nivel internacional en esta
materia no sólo por las violaciones lo Derechos Humanos durante la dictadura militar,
sino también en la situación de comisarías y cárceles. «Habría que cambiar todo
para volver a tener confianza, sobre todo en el aparataje judicial, que para mí es un
verso».
Eduardo Curuchet. Comcosur. Recosur.
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