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principal UPA - infos - molotov - archivo - agenda - emilio Doble agresión fascista con la descarada complicidad de la policía en San Sebastián de los Reyes Madrid.UPA 5\8\01. Mientras transcurrían las fiestas en
San Sebastián de los Reyes en la madrugada del 2 de septiembre
dos conocidos neonazis del pueblo agredieron a un chaval cerca de las
casetas del recinto ferial. Uno de ellos, Samuel, le agredió
con una litrona que rompió en el suelo en el costado y en la mano
a consecuencia de lo cual el chaval debió ser hospitalizado durante
un día por la herida recibida en la mano. Según el agredido, y como consta en la denuncia hecha en el juzgado
de guardia, ya en varias ocasiones el tal Samuel había amenazado
e insultado a este chico y a sus amigos. Después de salir del hospital al día siguiente y de interponer
la denuncia en el juzgado de Plaza Castilla este joven volvió a
San Sebastián de los Reyes a encontrarse en los locales de ensayo
de la urbanización Rosa Luxemburgo con sus amigos y compañeros.
Estos locales, además de estar acondicionados para que ensayen
grupos, sirve como lugar de reunión para diferentes colectivos
de la zona. Alrededor de la medianoche unos 8 neonazis (claramente uniformados como
tal) saltaron la valla y forzaron la cerradura que limita el acceso a
estos locales. Dos personas que se salían de uno de los locales
corrieron a avisar a sus compañeros que no tuvieron más
tiempo que encerrarse en los dos locales donde había gente. Cuando los nazis llegaron comenzaron a golpear las puertas y a causar
destrozos mientras que amenazaban a los encerrados con quemarlos dentro.
Mientras, los encerrados llamaron a la policía para que vinieran
a ayudarles. Después de un rato llegó la policía
ordenándoles que abrieran la puerta a lo que los encerrados les
contestaron que no podían porque la cerradura estaba rota por los
golpes. Cuando la policía consiguió abrir la puerta a patadas
los agredidos se encontraron con la sorpresa de que el tal Samuel se encontraba
junto a los agentes y un poco más lejos, al lado de los coches
policiales, los ocho neonazis agresores conversando con ellos tranquilamente.
La dotación policial era abundante: una dotación de antidisturbios,
6 nacionales uniformados y policía de paisano, entre ellos el comisario
del pueblo.
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