50 furgonetas de antidisturbios abortan una concentración contra la guerra en Madrid

Madrid. UPA. 18/10/01. Ni contra la guerra, ni de carácter pacífico y pacifista, ni nada de nada. El delegado del gobierno en Madrid, el Sr. Ansuátegui, lo tiene claro: no está dispuesto a consentir que nadie utilice la calle para expresar una protesta social. Arremete contra todo y contra tod@s. Y no atiende a razones. Esta mañana, unas 50 furgonetas de policías antidisturbios han tomado a las 11,30 la Plaza de Carlos V (Atocha), la Castellana y la Plaza de Neptuno de Madrid. En este último lugar, vecino al edifico de Las Cortes, estaba anunciada a las 12,00 una concentración contra la guerra y la participación del gobierno español en el contencioso, coincidiendo con la comparecencia del Sr. Aznar en el congreso de los diputados, precisamente para dar cuenta de esta implicación. El acto había sido convocado por la Coordinadora de Asambleas de Estudiantes de la Universidad madrileña y apoyado por la Plataforma "Paremos la guerra" y fue precedido por un paro en las facultades. Su autorización, solicitada a la delegación del gobierno por el procedimiento de urgencia, fue denegada por el Sr. Ansuátegui con el argumento de que, según sus palabras, la guerra se inició hace ya 14 días y por tanto no hay ninguna urgencia, quedando invalidado el procedimiento. Nuestro jefe de la policía es todo un filósofo.

Finalmente, unas 300 personas han logrado concentrarse en una de las entradas del Museo del Prado próxima a la Plaza del Neptuno, donde han sido rodeadas, grabadas en videocámara e instigadas constantemente por los antidisturbios. Éstos han identificado aleatoriamente a un montón de gente y han tratado de dispersar a todos los grupos que se formaban. Después de permanecer un rato frente a la entrada de la pinacoteca, l@s organizador@s de la concentración han "negociado" con la policía la salida de esa zona y tras llegar a un acuerdo, tod@s (manifestantes y policía acompañante) han marchado por la acera a lo largo del Paseo del Prado, desde Neptuno hasta la estación de Atocha. Una vez allí, l@s manifestantes han sido obligados a disolverse. En el trayecto, se han gritado lemas contra la guerra, la intervención de la OTAN, la participación de Aznar y sus secuaces y contra Ansuátegui y sus "democráticas" medidas. No ha habido detenciones, ni otros incidentes dignos de mención.