22 detenid@s a disposición judicial tras las cargas policiales en la manifestación antiglobalización de Barcelona

Barcelona.UPA.25/6/01. Decenas de miles de personas participaron el domingo 24 de junio en la manifestación antiglobalización de Barcelona. L@s asistentes procedían de los sectores sociales más diversos (sindicatos, okupas, "monos blancos"…). Las cifras de asistencia facilitadas por fuentes de la ciudad y de las organizaciones convocantes varían entre las 20000 y las 40000 personas.

La manifestación se desarrolló en ambiente mayoritariamente festivo, aunque un bloque de alrededor de 1000 personas desde el principio estuvo reventando cajeros, tiendas de ropa de marca, Mc Donald's… El despliegue policial fue impresionante (3000 antidisturbios, helicópteros…) pero no intervino durante la mani. Dentro de esta había numerosos policías de paisano que intentaron provocar incidentes y que posiblemente hayan provocado las carga policiales del final de la protesta, que se saldaron con 22 personas detenidas y más de 30 heridas. Estas cargas comenzaron tras l lectura del comunicado en la plaza de Catalunya, cuando se estaba disolviendo el acto.

Por la tarde, el bloque anarquista había convocado una mani a la que acudieron unas 1000 personas que acabó disuelta por las porras de los antidisturbios, aunque esta vez no hubo detenciones.

Casi todos los actos previstos para el lunes se suspendieron y en su lugar se convocó una concentración ante los juzgados para exigir la libertad de l@s detenid@s, que han sido acusad@s de daños a la propiedad, resistencia a la autoridad y más cosas.

Alrededor de 300 personas permanecieron concentradas durante todo el día, y a primeras horas de la noche varias personas habían sido liberadas y se esperaba la liberación de todas ellas, excepto un joven italiano, que posiblemente sea conducido a una cárcel para extranjer@s y expulsado de territorio español. Por otra parte, una cincuentena de personas realizaron una acción ante la Bolsa de Barcelona, aunque el despliegue policial de tres tanquetas de agua y numerosos antidisturbios impidió que la acción se llevara a a cabo en el interior del edificio. Se pactó con la policía realizar una concentración ante la sede de la Bolsa, en la calle.