UPA.27/09/01. El 19 de septiembre moría el preso político Ibrahim Erler en la cárcel turca de Tekirdag, tras inmolarse en protesta por el ataque de la policía a un funeral de una presa comunista. Otros dos presos se prendieron fuego ese mismo día por idéntico motivo y ahora tratan de recuperarse en un hospital. Unas jornadas más tarde, el presidente del gobierno español, José María Aznar, de visita por el país euroasiático, apretaba amistosamente la mano de su homónimo turco. Un gesto que supone el sí español a la entrada de Tuquía en la Unión Europea y la prevalencia de la economía por encima de cualquier otra consideración. Un gesto que implica hacer oídos sordos al grito de decenas de organizaciones humanitarias que desde hace años denuncian al gobierno turco por vulnerar sistemáticamente los derechos humanos más elementales. Un gesto que significa mirar hacia otro lado cuando se muestra el dolor que se sufre en las cárceles, donde decenas de pres@s polític@s llevan a cabo una huelga de hambre contra las celdas de aislamiento de los nuevos penales. Un gesto cómplice.

La muerte de Ibrahim se suma a una macabra lista de 32 fallecimientos desde que se iniciara esta huelga, hace más de 330 días. Según la AFAPP, el 13 de septiembre, Ümür Pahingöz, se convertía en otra "martir de la huelga de hambre a tumba abierta". Un día después, la policía no permitió siquiera que sus compañer@s y amig@s la enterraran en paz. Cuando el cortejo fúnebre recorría Armutlu, barrio de la periferia de Estambul, ésta cargó duramente contra los asistentes, deteniendo a 150 personas. Unas horas antes, las mismas fuerzas del "orden detuvieron a una delegación internacional formada por 5 alemanes y 2 holandeses, con el fin de impedirles ser testigo de su actuación. Para justificar esta "masacre", realizada sobre una zona que alberga varias casas de resistentes en huelga de hambre, la autoridad gubernativa apeló cínicamente a la "situación internacional".

Solidaridad en Madrid

A iniciativa de los colectivos Socorro Rojo Internacional, Cruz Negra Anarquista, Coordinadora Antifascista, Casa de los Pueblos de América y Fobia, alrededor de 50 personas se concentraron el 22 de septiembre frente a la embajada turca en Madrid "contra el genocidio de l@s pres@s polític@s". Acompañadas en todo momento por una discreta dotación de antidisturbios, las concentradas destacaron con sus gritos y pancartas la "complicidad de los estados europeos" en la represión de l@s pres@s turc@s y de manera particular la del gobierno español. "Vuestras manos blancas están ensangrentadas" y "Aznar, Turquía, terroristas de la Cía" fueron dos de las frases más significativas que l@s concentrad@s cantaron.