Acción Global.Barcelona.27/11/1. A primeros de noviembre, un juzgado de instrucción de Barcelona admitió a trámite una denuncia presentada por un grupo de entidades contra la policía y su máxima responsable en Catalunya, la delegada del gobierno Julia García Valdecasas, por las cargas policiales contra la manifestación contra la globalización capitalista del 24 de junio en la ciudad condal. La policía, infiltró agentes de paisano en la protesta que actuaron como provocadores, y causó con sus cargas indiscriminadas contra las miles de personas que participaron en la protesta, heridas a 50 manifestantes y detuvo a 22.

El titular del Juzgado número 22 de Barcelona (según otras fuentes juzgado nº 24), Juan Emilio Vila, ya ha empezado a tomar declaración a los mandos que dirigieron el dispositivo policial, aunque en el auto de admisión de la querella, indica que esta "no significa en este caso y en este momento, por lo menos una imputación formal ni mucho menos una inculpación". En este sentido recalca que si citar a declarar a los mandos policiales como imputados puede "ofrecer cierta sorpresa" es para garantizar "sin que se vean afectados ni por indicios ni por motivos graves" su derecho a la defensa. El juez consideró que los hechos imputados a la policía podrían constituir presuntos delitos de daños, lesiones, y otro delito cometido por funcionario público contra los derechos individuales de las personas porque "indiciariamente los comportamientos dañinos y lesivos (imputados por los denunciantes) estarían orientados no ya a perturbar la manifestación, sino a hacerla inviable, esto es a disolverla". Pese a la gravedad de estas imputaciones, el juez, en el auto, considera que "no existe en este momento un motivo plausible que justifique la citación a declarar de la delegada del gobierno ni del subdelegado en Barcelona David Bonet" máximos responsables de los cuerpos policiales en Catalunya y la ciudad condal.

El 14 de noviembre por la mañana el juez tomó declaración a Silverio Blanco que, el día de la manifestación contra la globalización, era el comisario al frente del Grupo Operativo de Unidad de Intervención Policial y por lo tanto el responsable directo de antidisturbios de la policía nacional. El segundo citado no acudió al juzgado por un error en su citación. En la querella por las cargas del 24 de junio aparecía el nombre de Angel Artregui, pero fuentes policiales aseguraron que "no existe ningún agente con este nombre ni con un nombre parecido". En un claro ejemplo de falta de colaboración con la justicia, por su parte la jefatura superior de policía remitió un escrito al juzgado asegurando que "no tiene constancia en sus ficheros" de la existencia de ningún Angel Artregui. No obstante, los abogados querellantes sostienen que se trata de un error tipográfico y que el nombre real es Angel Arregui. Este policía era el responsable del grupo de información es decir de los policías de paisano infiltrados en la manifestación.

Por su parte la jefatura superior de policía aportó ese mismo 14 de noviembre un vídeo supuestamente grabado desde un helicóptero policial, en el que, según fuentes policiales, se ve a manifestantes "del principio y del final de la cola saliendo de la multitud para provocar destrozos y volviendo a meterse en la manifestación". Las mismas fuentes aseguraron que en la grabación se puede ver a algunos jóvenes manifestantes "provocando y agrediendo a agentes de la Policía que iban de uniforme".