EL COLECTIVO DE MUJERES DE LA CASA DE LA MONEDA

Por atípico que pueda parecer, la idea de formar un Colectivo de Mujeres dentro de nuestro propio ámbito laboral, como es la Casa de la Moneda (Fábrica nacional de Moneda y Timbre), se gestó hace unos veinticinco años, cuando por aquella época ya algunas mujeres, trabajadoras de esta fábrica, empezaron a tomar contacto con el Frente de Liberación de la Mujer y a asistir a reuniones de las que, entre otras cosas, partió esta idea, teniendo en cuenta el gran número de mujeres que trabajamos en la fábrica.

Fue en el año 1990, durante las jornadas del 8 de marzo, cuando esta idea comenzó a fraguarse de manera, digamos, más estable. Desde hacía tiempo nos venía preocupando la discriminación de las mujeres, tanto en el campo laboral como en el social y, con este objetivo, comenzamos a reunirnos periódicamente y a realizar una serie de cuestionarios dirigidos a nuestras compañeras, que nos ayudaron a tomar una visión más generalizada de la orientación que había que darle a nuestro Colectivo.
De esta manera, nos fijamos unos objetivos y nos centramos en los temas que nos parecían más relevantes en la lucha feminista, como la historia y la situación actual de las mujeres en el trabajo asalariado, nuestro papel en la familia y las tareas sociales que nos habían impuesto, la sexualidad o el sexismo en la educación, entre otras.

Como en todo comienzo, las ganas y las ilusiones puestas en desarrollar aquello que tanto se desea fueron llevadas a cabo con una gran pulsión y, pronto, fuimos dándonos a conocer en todas las escalas de esta empresa. Para financiar nuestras actividades pagamos una cuota de 500 pesetas, que nos permite afrontar los gastos de la publicación de nuestra revista Pan y Rosas, así como contribuir con pequeñas sumas de dinero en ayudas, colaboraciones, actos y otras causas sociales de diversa índole que nos atañen y nos preocupan, como ha sido el caso del devastador terremoto del Salvador, del Huracán Mitch, de la Campaña contra la Ledishmaniasis, ayuda a Centro América, a Basida, a la rehabilitación de la Kasa Okupada de Mujeres Escalera Karakola, y últimamente hemos contribuido a la resistencia de l@s trabajador@s de Sintel, tema conocido por tod@s [ ver artículo al respecto en este mismo Molotov].

También colaboramos y hemos contribuido en los gastos de la Comisión 8 de Marzo, campaña contra el trabajo precario, contra los malos tratos, entre otras. Este dinero está también destinado a la ampliación de nuestra propia biblioteca y a la ejecución de actos que llevamos a cabo dentro de la Casa de la Moneda durante la semana de cada 8 de marzo con motivo del Día de las Mujeres, como son el pequeño teatrillo que, en forma de parodia, venimos representando desde el año 1986 en el salón de actos de la Fábrica y durante la media hora del tiempo de bocadillo, en los turnos de mañana y tarde, y que, dicho sea de paso, goza de gran expectación y de una masiva asistencia de compañer@s, quizá porque casi siempre se tratan contenidos relacionados con nuestro propio entorno laboral, aunque también hemos hecho representaciones sobre el derecho al aborto, los malos tratos o contra la Europa de Maastricht y la globalización.

Nuestra Compañía de Teatro quedó bautizada con el nombre de "A mi me va a dar algo", debido a que ésta era la frase que más se escuchaba entre nosotras momentos antes de salir al escenario por primera vez. A parte de esta breve aunque punzante parodia, que nosotras mismas escribimos y representamos, solemos contar con otros grupos o personas que amenicen nuestra semana. Este año, por ejemplo, hemos contado con la presencia de una cuenta-cuentos fabulosa. En otras ocasiones hemos hecho y hacemos charlas-coloquios y otras actividades sobre temas de interés general, contactando con personas especializadas en cada caso.
En ellas se han tratado los más diversos temas, que han ido desde la prostitución, historia de las mujeres, transexualidad, trabajo doméstico, agresiones sexuales... hasta el SIDA, la enfermedad de Alzheimer o la diabetes.
En diciembre de 1991, publicamos nuestra primera revista, a la que llamamos PAN Y ROSAS. El origen de este nombre nos vino dado por una poesía inspirada en una de las pancartas que exhibían las mujeres de una fábrica textil de principios de siglo en EE.UU. y que fue arrasada por los patronos como respuesta a las reivindicaciones de sus trabajadoras. Algunas murieron en aquel incendio provocado.

Los corazones pasan hambre igual que nuestros cuerpos: dadnos pan, pero también rosas, pedían aquellas jóvenes obreras en 1912. En la actualidad llevamos publicadas veintisiete revistas y un libro, que recoge todos los relatos presentados en el primer concurso literario del año 1996 y que, en sucesivos años, hemos ido convocando. Las revistas son vendidas dentro de la fábrica y distribuidas en el exterior como intercambio con otros grupos de mujeres, asociaciones e instituciones, o a personas que individualmente así nos lo solicitan.

El contenido de nuestra revista en sus distintos apartados dedica especial atención a aquellos temas relacionados con la situación de la mujer en general, que entendemos deben interesar por igual tanto a hombres como a mujeres, ya que desde nuestro punto de vista todo lo que contribuya a la no discriminación y a la igualdad opera en beneficio de toda una sociedad y eso es, en definitiva, lo que supone la lucha feminista, contrariamente a lo que mucha gente entiende por feminismo.

Como pequeño resumen, deciros que algunos de los apartados tratan sobre temas de actualidad, historia de las mujeres, recomendaciones de libros, alguna que otra entrevista con grupos o movimientos sociales, publicación de algún relato escrito por aficionad@s a estas artes, etc. En cada una de las publicaciones insertamos una separata que bajo el rótulo DESDE GALERAS y desde un prisma sindicalista, recoge las situaciones laborales más candentes del momento, acercando a todos los trabajadores la realidad que se produce en cada puesto de trabajo en particular y en la fábrica en general.

Nos reunimos siempre en nuestro tiempo libre, en un espacio que el Comité de Empresa os cede y es allí donde tenemos nuestros archivos y la biblioteca, que poco a poco vamos ampliando.

Y estos es, groso modo, nuestro Colectivo de Mujeres Casa de la Moneda.

"Los corazones pasan hambre igual que nuestros cuerpos: dadnos pan, pero también rosas"
"ya algunas mujeres, trabajadoras de esta fábrica, empezaron a tomar contacto con el Frente de Liberación de la Mujer y a asistir a reuniones de las que, entre otras cosas, partió esta idea"

Amelia Guía
Colectivo de Mujeres Casa de la Moneda
Contacto: Colectivo de Mujeres C/Jorge Juan 106, 28009 Madrid.