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  nº 37 julio 03
construyendo


La Madeja:
Cooperativismo, Intervención Social
y Redes de Economía Social


>> Sembla y Catep somos dos cooperativas de trabajo asociado que desarrollamos nuestra labor en el ámbito de la Intervención Social.

Marian Sánchez Ramos*
Somos cooperativas. Somos dos equipos pequeños que apostamos por el autoempleo colectivo. Pretendemos organizarnos desde la horizontalidad y la autogestión, intentando llevar a la práctica uno de los principios más importantes del movimiento cooperativo: ser dueñ@s de la toma de decisiones y de los medios de producción.

Hacemos Intervención Social. Trabajamos para hacer posible la participación social de las personas y las comunidades, favorecer la convivencia en la diversidad, optimizar la comunicación organizativa y fomentar la economía social. Asimismo, pretendemos desarrollar la competencia psicosocial de las personas, promover su salud y facilitar su incorporación sociolaboral. Todo esto lo hacemos desde estrategias como: formación de agentes de intervención social; desarrollo de proyectos de intervención con grupos; investigaciones sociales para la mejora de los proyectos de intervención; asesoramiento a entidades para la mejora de sus dinámicas internas.

Los principios que nos guían
A lo largo del tiempo, Catep y Sembla hemos desarrollado una corta pero intensa historia de colaboración, ayuda mutua e intención de trabajo conjunto. Y esto ha sido posible porque compartimos gran parte de los principios-guía que nos mueven, y de, por supuesto, parte del planteamiento ideológico-político que éstos encierran.

Estos planteamientos están ligados de diferentes formas y con distintas intensidades, al movimiento cooperativo. Creemos y estamos convencid@s (lo hacemos todos los días en nuestro trabajo) de que hay formas de relación y capacidad de afección en un territorio que pasan por trabajar desde referentes como la autogestión, la autonomía, la independencia y la intercooperación. Evidentemente, esto que suena muy bien, hay que operativizarlo en lo cotidiano y es en este punto, donde encontramos la mayor potencialidad y la mayor capacidad de crear modelos válidos de gestionar la forma de ganarnos el pan. Y no sólo eso, para nosotr@s, el cooperativismo es un estilo de vida, con las contradicciones, problemas e incoherencias que la vida tiene. Estar ligad@s al movimiento cooperativo, desde nuestro punto de vista, no pasa por tener determinada entidad jurídica, sino por entender que la toma de decisiones sobre la organización económica, social y política de una comunidad, ha de estar en manos de las personas y grupos que viven en ella.

Desde este planteamiento y a lo largo del camino recorrido, cada cooperativa por nuestro lado, hemos ido encontrándonos con otras cooperativas y equipos con los que también compartimos gran parte de esto. Y llegó un momento en que entendimos el potencial que podía suponer poner en relación a todos estos equipos.

Un encuentro entre cooperativas
Pensando en fórmulas para poner en relación a todos estos equipos, surgió la idea de realizar un Encuentro de cooperativas en el que dar a conocer(nos) el trabajo que estamos realizando cada una y explicitar los referentes utópicos hacia los que caminamos. Y todo esto, con la idea de fondo de crear líneas de colaboración, intercambio y relación en red. A este Encuentro de cooperativas, lo llamamos “La Madeja: espacio de conexión”.

A principios de abril realizamos el Encuentro y los objetivos que nos propusimos fueron:
· - conocer otros equipos que están haciendo intervención social, desde distintas estrategias, pero con maneras similares de entender tanto la intervención como la forma de trabajo interno de un equipo;
· - poner en común nuestros intereses y necesidades como equipos y buscar formas de colaboración en sentido amplio: desde organización interna a proyectos concretos;
· - crear un espacio de relaciones en red, en el que poder dar salida a todo lo anterior.

A este Encuentro asistimos 8 cooperativas (1), 13 equipos (2) con o sin entidad jurídica no cooperativa y 10 personas (3) que no pertenecen a ningún equipo pero que colaboran de forma habitual con alguno de ellos. En total, asistimos 79 personas.

Los ejes del debate
Para llevar a cabo los objetivos que nos propusimos, diseñamos dos jornadas de duro e intenso trabajo. A la hora de seleccionar los temas sobre los que trabajar, pensamos que sería interesante establecer de forma colectiva las bases de lo que entendemos por Economía Social, Movimiento Cooperativo y Redes. Y es en torno a estos tres ejes sobre los que estuvimos debatiendo.

Estuvimos discutiendo sobre “Economía Social y Movimiento Cooperativo”. El objetivo era contextualizar el mapa social sobre el que pretendemos seguir creando red, a partir de los polos de tensión con los que nos encontramos. Estos polos de tensión tienen que ver con que l@s cooperativistas somos soci@s-trabajador@s, es decir, somos empresari@s, pero también somos l@s currit@s y en ocasiones no es fácil gestionar los conflictos ideológicos que surgen en la toma de decisiones.

También trabajamos sobre “Las Redes en la Economía Social”. El objetivo era reflexionar sobre el concepto de red y, a partir de ahí, analizar las distintas formas de relación, desde un punto de vista tanto ideológico como económico, y las consecuencias que ello tiene. Esto último, con la idea de fondo de comenzar a pensar en cómo queremos que sea “nuestra” red.

Por último, trabajamos sobre “Estrategias de desarrollo de la red de cooperativas”. El objetivo era analizar las potencialidades de la intercooperación en red. Para ello hicimos un mapa tanto de las debilidades y fortalezas, como de las amenazas y potencialidades para, a partir de ahí, elaborar colectivamente propuestas de estrategias.

Conclusiones y propuestas del encuentro
De este Encuentro salieron conclusiones y propuestas sobre dos aspectos fundamentales para el desarrollo de La Madeja como espacio de conexión. Por un lado, lanzamos las líneas de la Red que queremos; por otro, concretamos propuestas para el desarrollo de la Red.

Sobre la Red que queremos, establecimos conclusiones sobre varios aspectos:
· - Cómo se teje: el proceso tiene que ser permanente y dinámico, apoyado en la comunicación y el intercambio, guiado por el principio de la cooperación. Este proceso ha de construirse desde alianzas coyunturales, no estructurales. Para ello es necesario construir desde la transparencia, la confianza y la diversidad enmarcadas necesariamente en la corresponsabilidad de todos los equipos y personas que estamos en esto.
· - “Pertenencia” a la Red: pensamos en relaciones, no en estructuras. Cada equipo es independiente y autónomo en la toma de decisiones sobre cómo gestionar su relación con los demás equipos. Si no hay estructura, no hay puertas, ni para entrar ni para salir. Se está en el espacio de conexión si hay relación. Y las relaciones siempre son posibles desde el acuerdo mutuo entre las cooperativas interesadas en el proyecto colectivo.
· - Flujo de relaciones internas: multidireccional y descentralizado. Quien quiera tejer, que coja hebra. Intercambiamos información, conocimiento, recursos...
· - El liderazgo: como una consecuencia de la corresponsabilidad y del flujo de relaciones, habrá liderazgos móviles, simultáneos y temporales: esta “madeja” tiene muchos cabos desde los que tirar. Esto forma parte de lo que entendemos por autogestión e independencia.
· - Relaciones con el entorno: pretende provocar cambios en él, desde la base de trabajar a lo grande desde lo pequeño. Y con una clara intención proactiva: no esperamos a que llegue el invierno para tejer una bufanda.

Esta Red se basa en un principio de utilidad, es decir, será útil si el espacio de conexión redunda en un beneficio mutuo para quienes la tejen; si optimiza el aprovechamiento de los recursos; si provoca un efecto multiplicador de unas cooperativas a otras, creando conocimiento y fortaleciéndolas; si permite incidir política y socialmente en un territorio.

Sobre el desarrollo de la Red, concretamos propuestas en torno a:
· - Espacios y canales de comunicación: mantener el contacto, facilitándolo a través de diferentes estrategias como: encuentros puntuales en la línea de este primero, nutriéndolo con aportes nuevos y diversos; distintos tipos de espacios de encuentro en función de las necesidades e intereses; construcción de una página web; etc.
· - Identidad colectiva: dar a conocer el proyecto colectivo de la Red en los territorios que habitamos cada una.
· - Criterios de relación con cooperativas que se interesen por La Madeja: pensar en el proceso de “acogida”; abrir a otras redes en las que cada una ya estamos funcionando; establecer vínculos entre cooperativas y movimientos sociales; acciones útiles para reforzar y motivar hacia la Red.
· - Fortalecimiento del espacio de conexión: crear grupos de trabajo que preparen materiales sobre organización interna, supervivencia en el sector, convenio colectivo, cooperativismo, sistematización de experiencias, etc.; revisar las decisiones y propuestas; compartir y redefinir criterios; generar mecanismos de evaluación; conocer otras experiencias similares, intercambio de saberes.
· - Intercambio de recursos y ampliación colectiva: componer una guía de recursos de la Red para estar al día de lo que hacen las demás, que incorpore demandas y necesidades; buscar líneas de financiación alternativas; apoyo a cooperativas que están surgiendo.
· - Colaboración bilateral-multilateral: desarrollo de proyectos que generen espacios productivos de trabajo.
· - Acción político-laboral: impulsar un convenio del sector.

La Madeja, un espacio de conexión
El desarrollo de estas propuestas es la tarea que tenemos ahora entre manos. De momento han surgido formas de colaboración conjunta desde varios puntos. Uno de ellos es la creación de un espacio web en el que, entre otras cosas, dar a conocer lo que vayamos desarrollando.

“La Madeja” pretende ser un espacio de conexión. Con esto queremos decir, que “La Madeja” no es la conexión, sino el material que tenemos para conectarnos. Es el material a partir del cual se puede tejer. Y se puede tejer de muchas maneras.
Sembla y Catep, a través de “La Madeja” hemos aportado el espacio de conexión, pero sobre cómo tejer, es para lo que montamos el Encuentro, para, de forma colectiva, pensar y trazar las líneas que iniciaran la forma de relacionarnos en red. Lo que ha salido a partir de aquí es de todas. Tirar del hilo es la tarea que nos propusimos. ...

(1) Acais, Catep, Enrédate, Epogé, Equis, IO comunitaria, Maelma y Sembla.
(2) Alquería, Akántaros, AYM, BAV, Buenahierba, Edad, El Erizo Azul, El Zaguán, Farapi Taldea, La Telaraña, Difus@s, Lukutabo y Moiras.
(3) Después del Encuentro, algunas de estas personas se han agrupado en un colectivo llamado La Alcayata.


* Catep-Sembla. Para contactar: catep@catep.coop y sembla@retemail.es

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