Pinceladas de la crisis argentina

Carne argentina
Varios autores
Editan La Productora (Argentina)
y Under Comics,
66 pág., 2002, 5,25 euros.
En blanco y negro.

Sobre el estallido social argentino de diciembre del 2001, hay ya multitud de libros, ensayos y análisis para cualquier persona con inquietudes y espíritu critico. De hecho, yo diría que empieza a haber una saturación. Pero muy poquitos de ellos nos describen la vida cotidiana, los cambios en la mentalidad de la población. Es quizás una de las mayores virtudes, de las varias que tiene, de este recopilatorio que reseñamos.

Son siete historietas, todas en blanco y negro, de muy diversos estilos de dibujo e incluso de viñetas y diseño de la página, pero con una muy alta calidad media, -sobre todo de algunos guiones, que arman historias geniales-, que nos dan otras tantas pinceladas de la vida durante esos días.

Retratos desde las más variadas perspectivas sociales (de la elitista clase alta sitiada en sus urbanizaciones de lujo, hasta las clases bajas, abocadas al saqueo para no morir de hambre, pasando por las angustiadas clases medias), políticas (desde la izquierda, hasta el neoliberalismo, pasando por las mayorías silenciosas e indiferentes), e incluso de genero (sí, también hablan las mujeres), pero todas con un elemento común: la crisis de los valores dominantes –el amor al trabajo, las relaciones de pareja, la familia-, la putrefacción de algunas personas, y la desaparición de muchas barreras sociales. Los dos hermanos que se encuentran ante el saqueo de un supermercado: uno defendiéndolo, el otro para robarlo, el ejecutivo de Repsol que vende a la hija para pagar las deudas, el ejecutivo del BBVA que pasa las navidades en “familia”...

Una descripción, en muchos casos, sin concesiones, -todo el edificio de la moral dominante sale muy mal parado-, que nos permite entender los miedos de las clases medias a perder lo que tenían, y la rabia y desesperación de los excluidos.

En la línea de la literatura social de finales del siglo XIX, los personajes sólo pretenden sobrevivir, buscándose la vida cada uno como puede, y no hay valoraciones morales por parte de los autor@s: es lo que hay. Un “es lo que hay” cada vez más renqueante, pues todo se desmorona aunque los personajes intentan mantener una ficción de normalidad: el novio/a como horizonte vital, la hinchada futbolera como referente, el crack, el futbolista de éxito como valor seguro, la navidad, etc.

Todo ello, con una edición cuidada, en la que se nota cariño: glosario de argentinismos, glosario de la crisis, ficha de presentación de cada personaje en cada historieta, para que sea más comprensible.. Si además, tras la edición está un sello independiente compuesto por once dibujantes y guionistas, mejor que mejor. Y encima, barato...

Sinsabores