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Ciudad Universitaria, a 7 de marzo de 2000.

CONSEJO GENERAL DE HUELGA BOLETÍN DE PRENSA I. Los verdaderos terroristas. Es clara la actitud policíaca y terrorista del rector y su abogado general, es evidente la persecución política que ejercen a la hora de levantar actas en contra de compañeros por estar en su lista, sin importar si participaron o no en determinada acción, incluso si estaban o no presentes en el momento de los hechos. Ese es el caso de los compañeros que ya tienen denuncias ante la PGR por la toma de rectoría el día de ayer. ¿DESPOJO? ¿A quién despojamos los estudiantes por cerrar la torre de rectoría, a quién le pertenece, a De la Fuente, a Migallón? Estamos realizando una acción de presión en contra de quienes no han resuelto nuestras demandas y mantienen presos a nuestros compañeros, no pensamos quedarnos a vivir ahí. ¿DAÑO EN PROPIEDAD AJENA? ¿Por la rotura de un vidrio y un candado? ¿Por qué se encierran con candado en la rectoría? ¿Por qué los universitarios no podemos entrar libremente a rectoría? ¿Qué esconden?. Por cierto, es falso lo que declaran las autoridades en el sentido de que se usaron ganzúas, martillos y soplete de acetileno. Lo único que se utilizó fue una segueta. ¿PRIVACIÓN ILEGAL DE LA LIBERTAD? ¿De quién? De la Fuente y sus funcionarios fueron los primeros que abandonaron el barco como ratas, por el túnel del sótano de rectoría y por cierto se llevaron con ellos gran cantidad de archivos ¿qué esconden ahí?. TODOS los trabajadores y personas que se encontraban en la torre de rectoría, salieron en pocos minutos a petición de los estudiantes. ¿A quién se privó de su libertad? De la Fuente sigue atizando el fuego con estas nuevas denuncias. No vamos a permitir que ningún otro compañero vaya a parar a sus cárceles. ¿Hasta cuándo van a entender las autoridades, hasta cuándo van a solucionar nuestras demandas y liberar a nuestros compañeros, hasta dónde van a llevar las cosas? Ya basta. II. Sobre las declaraciones de Juan Ramón de la Fuente. 1. El señor De la Fuente, en sus declaraciones de ayer respecto a la toma de rectoría: "este acto de provocación busca desestabilizar a nuestra institución y generar un problema nacional en tiempos particularmente sensibles y trascendentes para todos los mexicanos", deja ver con toda claridad cuál es su verdadera y única preocupación en estos momentos, revela con toda nitidez cuál es la misión que le encomendó su patrón Zedillo, cuál es la razón de ser de su imposición como rector: derrotar al CGH, acabar con toda organización estudiantil en la Universidad, para dejar el paso franco a su proyecto gubernamental de privatización de las Universidades Públicas del país; pero en el corto plazo lo que más les preocupa es presentar una imagen de "paz social" para su proceso electoral y para esto se les agota el tiempo. Les molesta que movimientos como el de la UNAM pongan a discusión de toda la población, los derechos que el gobierno nos ha venido arrebatando. A De la Fuente, Zedillo le encomendó una tarea precisa y falló, es un inepto. De acuerdo a los cálculos del gobierno, después del desalojo militar de la UNAM y de las detenciones en masa, el CGH debía estar muerto y después sólo restaría la "reconciliación" de la comunidad universitaria. Pues el muerto respira, y sigue en pie de lucha. ¿Qué esperaban, que olvidáramos todo, que el miedo nos paralizara? ¿Les incomoda que el movimiento estudiantil siga luchando por una Universidad para todos? ¿Tienen prisa para terminar con el conflicto universitario? Nada más fácil para terminar con el conflicto: SOLUCIONEN REALMENTE LAS DEMANDAS DEL CGH, LIBEREN INCONDICIONALMENTE A ABSOLUTAMENTE TODOS LOS PRESOS. 2. Miente De la Fuente cuando dice que las acciones emprendidas por el CGH en escuelas y facultades han sido rechazadas por la comunidad. Quien se ha dedicado a intentar violentar los acuerdos de las Asambleas en los diferentes planteles, son además de los directores y funcionarios, pequeños grupos de investigadores, profesores de tiempo completo y unos cuantos estudiantes; grupos bien organizados que a una llamada telefónica o por email, acuden presurosos a confrontar a los estudiantes. 3. Con sus declaraciones, el señor De la Fuente reconoce indirectamente lo que es claro para todos, el descrédito y aislamiento de su rectorado, ¿Quién sino sus directores, va a mover un dedo en defensa de la rectoría? 4. ¡Habráse visto mentiroso igual! No hay día en que la rectoría y su oficina del abogado general no "cacaree" las "gestiones" que han realizado por la libertad de los estudiantes que ELLOS encarcelaron. MIENTEN, las pruebas más fehacientes de que no han retirado los cargos a todos son: 1) que el viernes pasado que por fin le retiraron el cargo de despojo a un grupo de compañeros, estos pudieron salir de inmediato, 2) que a los 86 compañeros que ayer les "concedieron" el derecho de libertad provisional, se les seguirá el proceso por el delito de despojo y motín en agravio de la Universidad y 3) las declaraciones de la directora de la Preparatoria 2, en el sentido de que algunos de los estudiantes que cerraron la dirección de ese plantel, y a quienes levantó acta administrativa, tienen orden de aprehensión; cuando según las autoridades, las únicas 20 ordenes que quedan son contra no universitarios. Las únicas gestiones que viene haciendo la rectoría son para asegurarse que un grupo de compañeros, los que ellos consideran dirigentes, se queden presos en el Reclusorio Norte. Sobre el apoyo que ofrecen para obtener las fianzas, olvídenlo, no queremos ni un quinto que provenga de los mismos que encarcelaron a nuestros compañeros, de los mismos que ordenaron la represión, de los mismos que originaron este conflicto y lo han alargado de manera monstruosa con la peregrina ilusión de disolver la inconformidad. III. Sobre el despliegue de mentiras del Colegio de Directores. 1. Señores, quien ha puesto todo su empeño en el restablecimiento de la "normalidad" y la "reconciliación" en la Universidad son Zedillo, Labastida, De la Fuente y ustedes, porque creen que las clases serán el "bálsamo" que diluya poco a poco diez meses de lucha estudiantil y que cure la profunda indignación de la comunidad universitaria y la población contra ustedes, contra su cobarde acción represiva. Pero pese a todo su empeño deben reconocer que no lo han logrado. 2. Lo único que han gestionado las autoridades universitarias, de las que ustedes son la mayor parte, es el encarcelamiento de todos nuestros compañeros y las garantías de que un grupo de ellos se queden en el Reclusorio. Ah, claro, también están gestionando que otros compañeros que ahora están libres (aunque perseguidos y hostigados por sus guaruras y judiciales) y que forman parte de su lista, sean encarcelados unos y expulsados de la UNAM otros. 3. ¿Cuál diálogo se está bloqueando con la toma de rectoría? ¿Quién ha bloqueado el diálogo permanentemente durante estos más de diez meses? ¿Quién viola olímpicamente los acuerdos firmados el diez de diciembre? ¿Tiene algún límite su cinismo? 4. Por supuesto que estamos frenando y seguiremos frenando la transformación de la UNAM que ustedes pretenden imponer. No les vamos a permitir que expulsen de la Universidad a los estudiantes de escasos recursos, no les vamos a permitir que fraccionen la Universidad, no les vamos a permitir que poden a su antojo la investigación orientándola al servicio exclusivo de la industria, no les vamos a permitir que manejen la difusión de la cultura como si se tratara de partidos de futbol. NO SE LOS VAMOS A PERMITIR. LOS VAMOS A FRENAR. LOS VAMOS A HACER RETROCEDER. 5. No nos sorprende su clamor por más represión al movimiento estudiantil. No han hecho otra cosa durante todos estos meses. ¿No se habrán equivocado de profesión? ¿Su vocación no es más compatible con dirigir un reclusorio, por ejemplo? 6. Estamos de acuerdo con ustedes en que hay que poner alto a la violencia que impide discutir el futuro de nuestra institución. Alto a la violencia del Rector y su Consejo Universitario, imponiendo medidas a espaldas de la comunidad universitaria. Alto a la violencia de los directores allanando los espacios estudiantiles, amenazando y levantando actas universitarias y judiciales, proporcionando expedientes confidenciales de la UNAM a la PGR, eligiendo a los presos que no deben salir de la cárcel, señalando a los que falta por detener, llenando las instalaciones universitarias de guaruras y judiciales. Alto a la violencia irracional y absurda de las autoridades negándose a resolver las demandas elementales de los estudiantes. Alto a la violencia de meter a la PFP a la UNAM. Alto a la violencia de encarcelar a los universitarios que disienten de las autoridades. ALTO. Comisión de Prensa CGH-UNAM