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Ciudad Universitaria a 25 de diciembre de 1999.

CONSEJO GENERAL DE HUELGA BOLETÍN DE PRENSA I. Llegó la navidad y las autoridades no resuelven. ¿Hasta cuándo señores, hasta cuándo? En abril iniciamos esta huelga para que nos regresaran los derechos que con sus artimañas autoritarias arrebataron a la comunidad universitaria y con esto, a los jóvenes de México; ya estamos en Navidad, el año está a punto de concluir y ustedes siguen alargando el conflicto ¿es que no se han dado cuenta de que esta huelga no va a levantarse hasta que no den solución cabal a nuestras 6 demandas? ¿es que no han aprendido de sus errores? ¿Qué acaso no se han dado cuenta que por medio de las maniobras, la represión y las calumnias no nos han podido vencer, no se han dado cuenta que ese no es el camino a seguir? ¿Quién puede creer la aflicción que dicen sentir por todos los estudiantes que nos encontramos sin clases? ¿quién puede dar crédito a la prisa que dicen tener por que el conflicto se resuelva lo antes posible? ¿quién no sabe que la solución al conflicto está enteramente en las manos de ustedes y que si no se ha resuelto, es porque ustedes no han querido resolverlo? Conminamos, exigimos a las autoridades universitarias la inmediata solución cabal a nuestras 6 demandas. Dejen de alargar más el conflicto, el levantamiento de la huelga está en sus manos, resuelvan el problema de una vez por todas, pueden hacerlo, háganlo ya. Reúnan a su Consejo Universitario y abroguen el reglamento de pagos eliminando los cobros ilegales, deroguen las reformas de 1997 y cancelen los vínculos con el CENEVAL, desmantelen el aparato policiaco y de espionaje y anulen todo tipo de actas y sanciones, recorran el calendario escolar y anulen el fraude de las extramuros, y pactemos los términos de un congreso realmente democrático y resolutivo. Si hacen esto, la huelga ya no tiene razón de ser, el conflicto se resuelve de inmediato. ¡Háganlo! No pongan más pretextos. Ante esta exigencia que presentamos el día 22 en la mesa de diálogo, es absurda la respuesta de la rectoría en voz de Pérez Blas, quien respondió que "eso sería negar el diálogo". ¡Por favor! "Negar el diálogo" a cambio de que de inmediato se solucionen a cabalidad nuestras 6 demandas y, con ello, concluya de inmediato la huelga, ¿a quién le podría molestar?. Por lo demás, resolver el conflicto de huelga de inmediato, NO niega el diálogo, éste debe continuar, pues los problemas en la Universidad van mucho más allá de las demandas que ahora exigimos se resuelvan, y el diálogo habrá de continuar para abordar todos esos problemas. II. La Comisión de rectoría confirma la maniobra de De la Fuente. El miércoles 22, en Minería, algunos integrantes de la Comisión de rectoría, confirmaron lo que hemos venido denunciando insistentemente como la maniobra de Zedillo-De la Fuente, para intentar derrotar al CGH. Durante su intervención en la mesa de debates y en respuesta a un documento leído por la Comisión del CGH, donde se denunciaba dicha maniobra, varios delegados de la rectoría manifestaron que en la toma de opiniones de la comunidad que está realizando De la Fuente, el CGH es una parte pero no la única; reconociendo que no están buscando resolver la huelga con los huelguistas. Es decir que para la rectoría el diálogo es parte de su consulta para buscar "consensos" y no un mecanismo para solucionar el conflicto entre los demandantes -los estudiantes del CGH, que somos quienes estallamos y sostenemos la huelga-, y los demandados -las autoridades universitarias, que tienen que resolver nuestro pliego petitorio de 6 puntos. ¿Pero es que acaso le molesta al CGH que la comunidad universitaria sea consultada? Por supuesto que no, de hecho una de las demandas por las que sostenemos esta lucha, es precisamente para garantizar no sólo que la comunidad sea consultada, sino que sea ella misma quien tome las decisiones fundamentales sobre el rumbo que debe seguir la Universidad, en un Congreso Democrático y Resolutivo. Entonces ¿será que el CGH no está de acuerdo en que la comunidad universitaria exprese su punto de vista, respecto a como debe solucionarse el conflicto? Tampoco se trata de esto, sabemos perfectamente que la mayoría de los universitarios tiene sus propias propuestas al respecto y desea expresarlas para colaborar en la solución de la huelga, es más nos queda claro que una parte de la comunidad de la UNAM, se ha mantenido todo este tiempo al margen del conflicto, un poco como a la expectativa, sin tomar partido, debido fundamentalmente a que las medidas contra las que lucha el CGH, están dirigidas a golpear directamente a un sector de estudiantes. ¿Cuál es entonces el problema con que De la Fuente esté consultando a miembros de la comunidad, para plantear una "propuesta institucional de consenso"? Los problemas son varios: -El consenso de los universitarios, no se obtiene cuando una persona (o grupo de personas) escucha por separado las diversas opiniones de los otros y al final, define lo que a su parecer es un acuerdo para todos. No, llegar a un consenso tiene que ver con que todos escuchen las posiciones y los argumentos de todos, y a través de ese ejercicio, formulen el consenso. -Lo sesgado de la tal consulta, a la que acuden una enorme cantidad de autoridades, algunos académicos e investigadores (desconocemos si han asistido trabajadores de base), y muy pero muy pocos estudiantes. -Se consulta a "todos los universitarios" sobre los derechos que han arrebatado a los estudiantes. Este es un conflicto entre dos partes, los estudiantes despojados, que estallamos y sostenemos la huelga, y las autoridades, que nos impusieron ese despojo y a quienes les exigimos solución a nuestras demandas para así levantar la huelga; de manera que es muy claro quienes son los interlocutores en este conflicto. -El problema más importante, el fundamental, es que De la Fuente pretende engañar a la comunidad universitaria y a la población; intenta aprovecharse de la natural desesperación de todos ante la prolongación del conflicto -que es responsabilidad de las propias autoridades-; busca hacerse de una base de apoyo, busca reunir en torno suyo a un grupo de universitarios, lo más amplio posible, para usarlo como medida de presión para orillar al CGH a levantar la huelga sin la solución a sus demandas, para obligar al CGH a que acepte la "propuesta institucional" y de no ser así, justificar una salida represiva al conflicto. Es decir que De la Fuente ha estado consagrado, desde que tomó posesión de su cargo, a realizar lo que se denomina un "trabajo de base", no para elaborar su "propuesta institucional consensuada", sino para ganarse a una "masa" de universitarios que contraponer a la "masa" huelguista -puesto que en términos generales ya tiene su "propuesta institucional" desde el principio, llegó con ella a la UNAM; en todo caso la estará afinando para que le suene como una "buena oferta" a la mayor parte de los consultados por él-. Lo que está intentando De la Fuente con su "consulta" es cubrir el requisito que le exigió Zedillo a Barnés, el 31 de agosto, cuando este último acudió a Los Pinos a pedirle al presidente que nos aplicara el "estado de derecho", es decir que nos reprimiera. En aquella ocasión, Zedillo le planteó al entonces rector: "...toda medida adicional del Estado para la solución del conflicto (refiriéndose al empleo de la represión contra los huelguistas), ha de tener como sustento la voluntad democrática de los universitarios...Debe existir la expresión democrática, sistemática, cuantificable, debidamente acreditada de la mayoría universitaria a favor del retorno a clases...". Quedó claro que Barnés el despota fue incapaz de cumplir esta encomienda. Entonces Zedillo puso a De la Fuente en la rectoría -todos sabemos que así fue- para cumplir con esta misión, y a eso se ha dedicado con toda su energía y habilidad política. Hace casi un mes, el 30 de noviembre, con De la Fuente ya en la rectoría, en entrevista para el programa televisivo Zona Abierta, Zedillo insistió: "señores (dirigiéndose a los universitarios), busquen un mecanismo democrático para ponerse de acuerdo; pero a lo mejor ni siquiera estoy diciéndoles pónganse de acuerdo el pequeño grupo intransigente con el resto de la Universidad, ¡pónganse de acuerdo el resto de la Universidad!...Lo que tienen que encontrar los universitarios son mecanismos para encontrar las opiniones de todo mundo y ponerse de acuerdo...hablo de mecanismos acordados por la generalidad de los que participan activamente en esto para llegar a un acuerdo. ¿Y qué les he dicho? Si resuelven ese problema, el resto va a ser un problema...eh...distinto, y por supuesto, el gobierno no va a abdicar de ninguna de sus responsabilidades. Pero lo que no va a hacer el gobierno es complicarles el problema a los universitarios...". Esta es la razón por la que el CGH de manera reiterada ha estado denunciando la maniobra Zedillo-De la Fuente, pretendemos así alertar a la comunidad universitaria y a la población sobre lo que se viene contra el movimiento estudiantil, pretendemos advertirle a tiempo a los universitarios que apoyar la tal "propuesta institucional" será usado por las autoridades como un aval para emprender una salida represiva al conflicto, salida que la comunidad universitaria y la población rechaza tajantemente. En resumen, De la Fuente tiene bajo la manga la "propuesta institucional" que contrapondrá al pliego petitorio del CGH. Esa contrapropuesta no soluciona nuestras demandas, es una MUTILACION de nuestro pliego petitorio y no resuelve el conflicto (aunque no la han dado a conocer públicamente, sabemos que será una variación de lo pactado por el gobierno federal de Zedillo con el gobierno de la Ciudad del PRD; es decir, una mutilación de nuestro pliego petitorio, una suspensión de todos o algunos puntos del pliego petitorio, hasta un Congreso que no pueda resolver sobre esos puntos y queden impuestos, posponiendo todo para que pasado un tiempo -una vez que baje la movilización estudiantil- volvamos a estar en un conflicto igual o peor que el actual). La consulta de Ramón De la Fuente tiene el fin de hacerse de una basa social, una fuerza que respalde su contrapropuesta al pliego del CGH, para presionarnos a aceptarla y, si la rechazamos, justificar una salida de fuerza. El diálogo, las autoridades lo han visto, hasta ahora, como una forma más para hacerse de esa base social que respalde su contrapropuesta y aislar al CGH. En esto se resume la maniobra Zedillo-Ramón de la Fuente. Vemos cómo la están construyendo y cómo avanzan en esta dirección, y no dejaremos de denunciarlo por más que les resulte molesto a los comisionados de la Rectoría. A pesar de todo, el Consejo General de Huelga no renuncia al diálogo público y abierto que hemos exigido en todo momento, como única vía para solucionar el conflicto. III. Respuesta al Gobierno del D.F. NO SOMOS POLICIAS. ¿Nos piden colaboración?, Precisamente ustedes que han lanzado a su cuerpo de golpeadores, a atacarnos salvajemente, siempre cuando nuestras manifestaciones ya se disolvían, cuando nos encontrábamos en franca desventaja, por la espalda, persiguiéndonos sin tregua, encarcelándonos, fichándonos, entregándonos en manos del gobierno federal a su sistema carcelario, para repetir el proceso; acusándonos de motín -un cargo establecido claramente para ejercer la represión política, y que no ha sido retirado a nuestros compañeros-, acusándonos de haber roto el casquillo de acero de una bota de un granadero con nuestro cuerpo, de haber roto el escudo de un granadero con nuestras cabezas, de haber roto un casco de granadero con nuestros rostros; y afirman cínicamente que nos otorgan su "perdón", por los "daños ocasionados" al equipo de sus golpeadores, ya que son "gajes del oficio". Qué triste papel juegan hoy aquellos que en el 68 se manifestaban por la desaparición del cuerpo de granaderos y hoy, como gobierno, lo usan para reprimirnos. Nos piden nos rebajemos a su altura, pero no señores, no le haremos segunda como ustedes, al gobierno de Ernesto Zedillo. ¿Nos piden colaboración?, precisamente ustedes, cuando la dirección de su partido ha negociado con el gobierno federal y con la rectoría, en ya varias ocasiones nuestra huelga, pretendiendo que la levantáramos sin la solución a nuestras demandas. Cuando estudiantes de su partido, han venido jugando el triste papel de "quinta columna" dentro de nuestro movimiento, impulsando la línea del gobierno por dentro y por fuera del CGH; ante su incapacidad de ganarla en las Asambleas, impulsando sus paupérrimas acciones paralelas a las del CGH. Cuando académicos universitarios miembros y simpatizantes de su partido (Rosaura Ruiz y Rene Drucker), que se decían partícipes de nuestra lucha, que incluso, Rosaura, discutía y votaba en nuestras Asambleas, ahora son parte de la Comisión de Rectoría. El Consejo General de Huelga jamás jugará el papel de policía que ustedes, gobierno represor, nos solicitan, esto significaría avalar la represión. A través de los años, pocos gobiernos en el D.F. han usado al cuerpo de granaderos -por cierto anticonstitucional- para reprimir a un movimiento social con la saña e insistencia como lo han hecho ustedes con nosotros. La actitud diazordacista es sumamente tentadora para quien no tiene memoria, para quien se olvida que por medio de la represión es como se ha tratado por décadas al que critica y lucha en contra del gobierno; en fin, podemos decir que para no recurrir a la represión y no olvidar a los de abajo, no basta con sonreír en los periódicos y gritar a mil voces que se castigará a la delincuencia golpeando estudiantes. No es posible que sigamos siendo reprimidos por alguien que solo escucha las voces de los de arriba, por alguien que a pesar de haber tenido una educación universitaria piense como granadero. Señora Rosario Robles, si es que tiene una poca de consciencia y dignidad, abandone el cargo que tiene en el gobierno del D.F. que bien le ha servido para reprimirnos. La única voz que oirá de nuestra parte el Gobierno del D.F. es la exigencia de castigar a los culpables intelectuales y materiales de las golpizas que nos han propinado, como nuestra reiterada exigencia de desaparición del cuerpo de granaderos. Señores, tengan presente que la dignidad no se gana cambiando las posturas políticas de un lado a otro, deberán aprender que la dignidad se gana luchando y no buscando posiciones políticas que nos dejen bien parados con los de arriba y traten de engañar a los de abajo. Se han colocado en donde les corresponde, al lado de las autoridades universitarias y el gobierno federal. Los felicitamos que hayan tenido el descaro de desenmascararse ante la opinión pública. IV. Navidad en la huelga Guajolotes, piernas de cerdo, romeritos, pozole, tamales, carnitas, taquizas, y piñatas, entre otros, fue lo que organizaciones sociales, padres de familia y población en general, nos hicieron llegar para el gusto de nuestros paladares. Gracias a todos ellos que nos siguen apoyando y dándonos su respaldo, sin el cual hubiera sido imposible la resistencia que hemos logrado mantener por más de 8 meses, para ganar la gratuidad de la educación y evitar que se expulse a los hijos de los trabajadores de la Universidad. V. Petición navideña. Solicitamos a todos los periodistas que cubren la fuente universitaria, que como regalo navideño al CGH, reproduzcan íntegramente este boletín de prensa en sus respectivos medios, si pueden, gracias. Comisión de Prensa y Propaganda CGH - UNAM