Montevideo, 20 de
noviembre de 2002.-
En los últimos días se han sucedido una serie de represiones en el Penal de
«Libertad».
El 14 de noviembre los presos del celdario fueron baleados y apaleados. Una carta firmada
por más de cincuenta presos ha denunciado lo sucedido y ha aportado los nombres de los
oficiales involucrados y por tanto responsables directos de estas violaciones de DD.HH.
Incluso familiares de presos que habían sido heridos en la represión denunciaron
públicamente lo sucedido. Una madre llegó a mostrar a la prensa y a las autoridades la
campera de su hijo acribillada por las balas de los milicos asesinos.
Sin embargo, la represión no cesó y el domingo siguiente, y también el lunes nuevamente
los presos son reprimidos y baleados con similares características que el jueves 14.
El hijo de la madre que había realizado la denuncia fue nuevamente baleado, esta vez en
el pecho y en el brazo...
Todo esto que denunciamos ha sido documentado ante médico forense e incluso se están
realizando denuncias ante los juzgados competentes de manera que de una vez por todas se
haga justicia con los presos.
La oficialidad se lava las manos y argumenta que todo se ha debido a la fuga de un preso.
Lo que nos plantea que se sigue insistiendo, al igual que los nazis, que todo acto de
rebeldía aunque sea individual será reprimido colectivamente.
El ministro del Interior deriva todo a Navas -actual Director Nacional de Cárceles- y
este se muestra «sorprendido» por lo acaecido... Pero estas expresiones no son nuevas en
estos personajes. Ellos son los principales responsables de todo estos hechos y de todas
las violaciones de DD.HH. que se realizan en los campos de concentración de la
«democracia» uruguaya.
La corrupción y la violación sistemática de los DD.HH. ha hecho pedazos el sistema
carcelario y ante esto, el ministro del Interior ha preferido hacer más de los mismo:
más represión. Hoy ni siquiera aseguran la alimentación y la mínima atención médica
y así cada 13 días muere un preso social.
Pero esto sucede con la juventud pobre encarcelada, por que para los Peirano, los Blancos
y los milicos verdugos y corruptos tienen hoteles de lujo y ellos sí cuentan con todas
las garantías, y están «presos» el mínimo tiempo posible o salen en libertad por
«razones humanitarias» como De Avila.
Para finalizar recalcamos lo que hemos dicho en más de una oportunidad: el penal de
«Libertad» es simplemente un campo de exterminio. No hay razones de ningún tipo para
mantenerlo funcionando (ni siquiera las de «seguridad»).
Solo a la soberbia represiva y la impunidad de un régimen se le puede ocurrir mantener a
la gente en escombros y baleándolos todas las noches como lo han hecho desde marzo. Y no
es casual que allí hallan recalado milicos del estilo de Sande Lima que ya habían estado
involucrados en violaciones de DD.HH. en tiempos de dictadura. Por eso reafirmamos que el
penal de «Libertad» no puede existir más.
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