--[-tridente-]--

editorial black vox lascivo y a cuadritos don graf es mi filósofo preferido sementerio criticART nie matu ce mierce enlaces

Black Voice
De entre las voces agudas de la cultura popular, emerge la voz negra de la disidencia: un espacio para esas palabras oscuras que iluminan, para esas letras oscuras que nos invitan a trascender, para esa voz negra que grita fuerte.
Voces que acompañan con sus tonos la melodía de un nuevo día. Pensamiento crítico para un mundo en estado crítico.


Acerca de los Valores

por Cuark

Desde tiempos inmemorables se le han impuesto al hombre concepciones valóricas Acerca de su medio, de las relaciones interpersonales y de ellos mismos; llevándolos con esto a visiones parciales y subjetivas de su entorno, trasformando sensaciones en valores (Como en el caso del amor) ¿valores que se presentan como imperativos categóricos? Como afirmara Kant, aquel teólogo alemán, que plantea que un valor es un supremo mandato que se impone al sujeto por medio de su conciencia. Visión del todo parcializada como luego Nietzsche desmintiera. Un valor es un  acuerdo impuesto por las mayorías, o tal vez por las masas dominantes, como un imperativo que ordena las formas de actuar en medida de las conveniencias de quien lo impone; a causa de esto el hombre a vivido encerrado en concepciones fundamentalistas que no sólo aseguran el dominio permanente de un tipo de hombre por sobre el ser masa, sino que perpetúan la ignorancia y la fe ciega, fe que genera que el ser común se aleja del afán por comprender, por experimentar y sentir placer sin negar sus instintos, ya que al contrario de lo que muchas afirman, creo; como también otros han creído, que el hombre actúa en gran medida por mandato viseral, sin conciencia clara, por puro instinto.

Creo que cualquier sensación que se eleve a la altura de valor imperecedero seguido por una cultura entera (El amor es el valor tras la religión judeo-cristiana, aquellos que poseen un Dio$ que es un cariñosito gigante (=p); todo amor y nada real) No sólo representa un problema inminente sino que merece ser rápidamente desenmascarado y presentado como un fraude de quienes creen que por esta imposición evitaran que el ser humano comprenda su naturaleza de animal y de una vez por todas termine de negarla elevándose a la altura de "ser" elegido por mandato divino, mandato supremo del inconsciente colectivo... ignorancia del hombre rebaño, imposición cultural. El peligro que encierra el todo poderoso amor es exactamente eso, la negación de todo "Valor natural", la negación de que el ser humano es un ser del todo complejo que experimenta constantemente un caos de información e impulsos químicos internos que reaccionan a este caos, electricidad, química, desorden constante, no sólo de amor vive el hombre, también vive gracias al odio, a la angustia, al miedo, a la envidia, al rencor. El amor se muestra como un valor sólo alcanzado por la mente de quien a tenido un "despertar espiritual" (Despertar al terror de su propia insignificancia y querer inequívocamente trascender y no sólo trascender con actos materiales, sino que trascender como entidad, he aquí la ridiculez del miedo de la cultura Judeo-cristiana).

En nuestra formación como individuos nos han planteado como meta ser uno, uno sólo frente al medio, una entidad que se comprende cabalmente debido a que sino se entiende se esta confundido, y todo lo que esta confundido tiene miedo, por lo tanto este miedo nos guía a justificar en vez de  explicar; cito a Friederich Nietzsche "Soy todo lo que esta completamente confundido". Nos plantea al individuo como la meta del ser, como el amor al prójimo es la meta del individuo, una doble mentira. Una dualidad occidental, Tesis- antitesis (Heggel).

Todo concepto metafórico postulado por quienes dieron inicio al caudal de conocimiento humano ha sido hoy en día malinterpretado como axioma religioso, tomo como ejemplo de esto el concepto de -alma-, palabra proveniente del latín -anima-, que traducido al español sería algo así como lo que anima o lo que da movimiento; al traducir la palabra se hace evidente su carácter hipotético y con esto quiero afirmar que pertenece al caudal filosófico clásico (Albores de la ciencia) lo que nos quieren decir con esto no es que necesariamente existe dentro de nosotros otro yo, un yo verdadero, es sencillamente que dentro de nosotros existe una energía desconocida en ese entonces que nos permitía movernos (Impulsos químicos y eléctricos), el patetismo es evidente al darnos cuenta que una cultura completa justifica sus creencias en una hipótesis anterior a la creación de su propia religión (religión que por lo demás dice clara referencia con el caudal de conocimiento helénico y latino).

Las prácticas afectivas de los padres son fundamentales en el desarrollo del prepuber (amor como sentimiento no como valor de vida). Todo ambiente no hostil permitirá un desarrollo integral en la formación de un sujeto, es evidente que si ponemos a un individuo prepuber en un ambiente adverso existen amplias probabilidades de que su desarrollo cognitivo sea inferior al de un individuo sujeto a un ambiente no hostil. Esto sólo comprueba lo dependiente que un individuo puede ser de su ambiente, teorías ampliamente tratadas ya por muchos teóricos del desarrollo humano.

No creo que sea valido hablar del amor como el sentimiento supremo por sobre cualquier otro tipo de relación afectiva, ya que el sujeto no experimenta sólo amor en su formación, también experimenta deseos, sensaciones de respeto e idolatría, etc.

Toda pauta valórica se ve definida por la apreciación de un sujeto, esta apreciación es evidentemente sólo aceptar tal valor o negarlo, bueno o malo. Por lo tanto tal dualidad sólo nos conduce a una parte el pensamiento judeo-cristiano fundamentado en las teorías de la temprana filosofía greco-romana. Tan sólo un filtro de entendimiento no la verdad, la utopía inalcanzable, lo real.

El amor es un punto importante en la formación del sujeto como también lo es aprender a canalizar su odio sin miedo para poder evitar así vivir reprimidamente, el amor se opone a plantearle a un ser querido que existe algo en el que me disgusta, ya que podría evidentemente causarle un daño, ya que nadie espera que un ser que en el supuesto te ama sea totalmente sincero... negación de lo real, ficción... cristianismo.

Todo sentimiento es una forma de placer, placer entregado en forma de endorfina, dopamina e incluso adrenalina, placer que no debería estar sujeto a una represión constante de pautas valóricas oxidadas por el paso de los años, el amor es un sentimiento, no el "sentimiento" de máxima pureza y verdad, cierto es que sentirlo es hermoso, pero también es cierto que atolondra y confunde.

El individuo se ve sujeto a estas relaciones afectivas toda su vida, el individuo es un derivado de estas relaciones afectivas.



El mundo moderno y la acción libertaria
por Pablo A.
 
El mundo moderno, con sus motivaciones y consecuencias, es, probablemente, el peor invento del ser humano. De ese ser humano cada vez menos animal y cada día más artificial. Es fácil identificar el por que de estas terroríficas aseveraciones. La aniquilación de culturas aborígenes, deporte favorito del Primer Mundo y de sus representantes regionales en el Ultimo Mundo. La absurda destrucción y contaminación del medio ambiente natural. El excesivo y compulsivo consumismo, hobby preferido de la sociedad actual. La proliferación del odio patriota y la guerra que el Imperio ha creado. Y otros infinitos motivos para considerar a esta vida moderna, la peor etapa de la historia del ser humano y del planeta Tierra.
(Si eres una persona que cree que el mundo está bien, que no podría ir mejor, que la justicia existe, que no hay hambre y todos son felices, entonces deja de leer, corre por una soga y dale fin a tu miserable existencia inconsciente. Si aún no te suicidas y estas dispuesto a aprender algo más, sigue leyendo�)
Está claro, el mundo está muy mal, y nosotros somos responsables de eso. Por dos motivos principalmente. Primero, por hacer, pensar y creer cosas que hagan avanzar la maquina de destrucción y �estupidización�. Y segundo, en el caso que no hagamos tales cosas, por quedarnos sin hacer cosas que hagan retroceder la maquina, o que la destruyan definitivamente. Y no se trata de comprometernos con causas y/o movimientos magníficos que, entre alardeo y griterío de jactancia, se hagan cargo de la salvación del mundo. Claro que no. Se trata de identificar nuestras necesidades reales (no las creadas por un sistema de consumo asfixiante) y las de quienes nos rodean, para así, crear nuestras propias formas de vivir, pensar, actuar, comer, jugar, relacionarnos. Esa es la primera y más certera forma de acción libertaria. Esa que nace de lo que nosotros realmente necesitamos y deseamos. Toda intelectualización o teorización de la lucha individual y colectiva, es secundaria. Y es definitivamente secundaria, porque nace luego de la experiencia individual o colectiva de cualquier situación social. Y es que actualmente desconfiamos tanto de las experiencias corporales y de las sensaciones intuitivas, que optamos por quedarnos con la teoría posterior a la experiencia, con la intelectualización de ese momento verdadero. Así es como nos acogemos a ideologías y nos agrupamos con otros fanáticos de la teoría, para encausar nuestras ideas vacías de experiencia y llenas de discurso.
El mundo actual es, mayoritariamente, una acumulación de experiencias desagradables y apestosamente tristes. Nos damos cuenta al despertar, al comer, al caminar por la calle, al conversar con nuestros jefes, profesores, compañeros, colegas, hijos, padres, hermanos y amigos. Lo entendemos claramente, cada vez que nos sentimos amenazados por la inestabilidad macroeconómica, cada vez que deseamos hacer algo y nos sentimos impotentes porque no deberíamos o no estamos dispuestos a arriesgar lo que ese deseo significa. Nos afecta directamente cuando abrimos los ojos en la mañana y nos damos cuenta que estamos haciendo miles de cosas que no queremos hacer, solo para sobrevivir a un sistema de presiones y consumo inconsciente.
¿Cómo es posible que muchos nos demos cuenta de lo feo y triste y aburrido de la vida moderna, pero tan pocos estén haciendo algo nuevo, algo entretenido, algo apasionado, algo que cambie, algo que aporte realmente?
¿Qué nos pasa que existe tan poca coherencia entre lo que sentimos en nuestra más sincera intimidad y nuestra vida cotidiana?
Es necesario que exista esa coherencia entre lo que sentimos con lo que hacemos. Es imperativo que busquemos las formas necesarias para establecer esa coherencia de una forma sana y beneficiosa para todos.
Si sabemos que el mundo no esta andando bien, deberíamos tener claro que es necesario actuar para que eso no sea así. Y ese actuar significa de todas maneras, cambiar, modificar, transformar y crear algunas cosas.
La acción libertaria está contenida en todas las situaciones que rompan cadenas, que quiebren fronteras, que trasciendan los paradigmas y los prejuicios. Existe y se manifiesta en todos los momentos de emoción extrema, de catarsis colectiva. En cada historia individual que hable de una vida distinta y auténtica.
La acción libertaria consiste en abrir el espectro, extender el horizonte, crear nuevas opciones. Consiste en liberarnos y liberar a otros. Y no está determinada por una forma específica. Hay tantas posibles acciones libertarias como personas en el mundo y personalidades en cada una de ellas. No es la acción de este tipo, propia del anarquismo o el marxismo. No es propia del activista, ni del intelectual rebelde. Es tan propia de estos como de la dueña de casa aburrida de la televisión. Es tan propia de esos como de los jóvenes indígenas que aman su tierra y su historia y su magia. Es tan libertaria y activa la vida de un profesor dispuesto a confiar en sus alumnos, sin pensar en la conveniencia o el contrato con su jefe, que el activista anti-capitalista que revienta vidrios y discursea sobre la acción directa violenta. Es tan mía como tuya, tan nuestra como suya.
Todos estamos llamados (por nuestros hermanos y hermanas) a actuar y ser coherentes con nuestras sensaciones e intuiciones. A descubrirnos en la naturaleza libertaria y liberadora de nuestro cuerpo. A levantarnos del letargo consumidor para despertar en un mundo nuevo, lleno de amor, paz y comunidad.
El mundo moderno es una mierda inútil como abono, pero nosotros sabemos que podemos limpiarlo y crear algo nuevo sobre el suelo fértil de la vida.

editorial black vox lascivo y a cuadritos don graf es mi filósofo preferido don graf es mi filósofo preferido criticART nie matu ce mierce enlaces

para este sitio se uso como base un oswd site llamado  glöp!

this page is  valid HTML 4.01 Transitional

Copyleft 2003 Tridente